MIS PIES SE ENFRENTAN AL CALZADO CERRADO. CONSEJOS
Llegamos al final del verano y se acerca el otoño. Es el momento de los cambios de armario y como no a nuestros pies. les llega la hora de enfrentarse al calzado cerrado.Venimos de aproximadamente 3 meses de sandalias, chanclas, ir descalzos y llevar calzado ancho, pero ha llegado la hora de acostumbrar a nuestros pies a jornadas laborales largas e intensas dentro de botas, botines, mocasines y demás calzado estrecho.
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Preparar el pie, poco a poco ir adaptando el calzado progresivamente. Recomendamos empezar con zapatos bajos de 3 a 4 cm de altura en el talón y en la medida de lo posible, ir controlando las horas de utilización de éstos.
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Utilizar un calzado transpirable, con suelas ergonómicas y que respeten la comodidad, de no ser así, nos podremos encontrar con problemas en la piel de nuestros pies, en la pisada, rodillas, tobillos, incluso cadera, ya que el pie se ha podido ensanchar ligeramente durante estos meses de verano, el dolor puede modificar nuestra manera de caminar.
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Secar los pies cuidadosamente. El exceso de humedad provoca múltiples problemas en los pies, por lo que deben secarse minuciosamente, prestando especial atención al espacio interdigital, para evitar la aparición de hongos y bacterias.
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Calcetines adecuados, nos protege de las posibles erosiones que nos pueden producir los materiales de fabricación interna del calzado, no es lo mismo materiales sintéticos, que materiales como el algodón o fibras naturales.
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Hidratación de nuestra piel, durante el verano nuestros pies sufren más de lo normal, por ello es importante hidratar y cuidar nuestros pies.
Si tenemos problemas de rozaduras, utilizar sistemas de acolchado y vaselina en pieles sensibles.
