¿Qué es la angustia?: Sentimiento de angustia o tristeza

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Muchas veces sucede que estos tres conceptos se confunden, las personas tienen dificultad para poder diferenciar de cuándo estamos hablando de una u otra situación lo cual, para el que lo sufre, agrega un cierto grado de desconcierto.

Me propongo comenzar a hablar de los mismos y de su relación con la realidad que el sujeto vive como forma de poder entender el porqué y el cómo de cada uno.

¿Qué es la angustia?

La «angustia» es un estado emocional que se caracteriza por un sentimiento profundo de tristeza, desesperación o inquietud. Es una respuesta emocional que a menudo surge en situaciones de incertidumbre, miedo o cuando una persona se enfrenta a problemas o desafíos que parecen insuperables.

La angustia puede manifestarse de varias formas, incluyendo:

  1. Emocionalmente: Se siente como una tristeza profunda, una sensación de vacío o desesperanza.
  2. Físicamente: Puede incluir síntomas como opresión en el pecho, aumento del ritmo cardíaco, problemas para respirar o un nudo en el estómago.
  3. Cognitivamente: Puede afectar la capacidad de una persona para pensar con claridad, concentrarse o tomar decisiones.
  4. En el comportamiento: Puede llevar a evitar ciertas situaciones, aislamiento social o falta de interés en actividades previamente disfrutadas.

La angustia puede ser una reacción normal a ciertas situaciones de la vida, como la pérdida de un ser querido o grandes cambios.

Sin embargo, si es intensa, persistente o interfiere con la vida diaria, puede ser un signo de un trastorno de ansiedad o depresión, y en esos casos, es importante buscar ayuda profesional.

¿Qué es la tristeza?

La tristeza es una emoción humana fundamental que se caracteriza por sentimientos de dolor, desaliento o desesperanza. Es una respuesta natural a experiencias de pérdida, decepción, fracaso o cualquier situación que se perciba como negativa o desfavorable. La tristeza es una parte integral de la experiencia humana y juega un papel importante en el proceso de adaptación a los cambios o pérdidas en la vida.

Características de la tristeza:

  1. Respuesta a Eventos Específicos: La tristeza generalmente se desencadena por eventos específicos o situaciones, como la pérdida de un ser querido, el fin de una relación, el fracaso en alcanzar un objetivo importante, o la decepción por una expectativa no cumplida.
  2. Cambios en el Estado de Ánimo y Comportamiento: Puede llevar a una disminución en la motivación o el interés en actividades que normalmente son placenteras. También puede causar llanto, retiro social, disminución de la energía o cambios en los patrones de sueño y alimentación.
  3. Función Adaptativa: Aunque es una emoción desagradable, la tristeza cumple una función importante en el proceso emocional de una persona. Permite reflexionar sobre experiencias personales, desarrollar empatía y crecer emocionalmente. También facilita la búsqueda de apoyo y comprensión en otros.
  4. Duración y Severidad: La tristeza es normalmente una emoción temporal que disminuye con el tiempo. Sin embargo, si se prolonga o se intensifica, puede evolucionar hacia una depresión clínica, una condición más seria que requiere atención médica.
  5. Expresión y Cultura: La forma en que las personas expresan la tristeza puede variar ampliamente, dependiendo de su personalidad, contexto cultural y circunstancias individuales.

La tristeza es una parte normal de la vida y no siempre es algo de lo que hay que huir o evitar. Aceptar y comprender la tristeza puede ser un paso importante en el desarrollo emocional y en el aprendizaje de cómo manejar eficazmente las emociones negativas.

Sentimiento de angustia o tristeza

La angustia y la tristeza son emociones que a menudo se confunden o se utilizan indistintamente, pero tienen diferencias clave en sus características y en cómo se experimentan.

Diferencias entre angustia y tristeza

  1. Naturaleza de las Emociones:
    • Angustia: Es una emoción más compleja y a menudo se asocia con sentimientos de ansiedad, inquietud y una sensación de desesperanza o desesperación. La angustia puede ser más intensa y abrumadora, y a menudo está relacionada con una sensación de incertidumbre o miedo ante lo desconocido.
    • Tristeza: Es una emoción más específica y se asocia generalmente con sentimientos de dolor, pérdida o decepción. La tristeza suele ser una respuesta a un evento específico, como la pérdida de un ser querido, una decepción o un fracaso.
  2. Duración y Desencadenantes:
    • Angustia: Puede ser más persistente y menos ligada a un evento específico. A menudo surge de preocupaciones internas o miedos profundos, y puede ser más difícil de resolver o entender.
    • Tristeza: Generalmente es temporal y más directamente relacionada con un desencadenante específico. Una vez que la situación se resuelve o el período de duelo termina, la tristeza tiende a disminuir.
  3. Efectos Físicos y Psicológicos:
    • Angustia: Puede tener efectos más intensos, tanto físicos (como opresión en el pecho, dificultad para respirar) como psicológicos (como sentimientos de pánico o desesperanza).
    • Tristeza: Sus efectos suelen ser más moderados, aunque pueden ser profundamente sentidos, como llorar o sentirse decaído.
  4. Respuesta y Manejo:
    • Angustia: Dado que a menudo es más intensa y menos concreta, puede ser más difícil de manejar y puede requerir estrategias de afrontamiento más complejas o incluso ayuda profesional.
    • Tristeza: A menudo se puede manejar a través del tiempo, el apoyo emocional de amigos y familiares, y el proceso natural de duelo.

En resumen, aunque ambas son emociones negativas, la angustia es generalmente más intensa, persistente y vinculada a la ansiedad y el miedo, mientras que la tristeza es una respuesta emocional más directa a una experiencia de pérdida o decepción

Sentimiento de tristeza

La tristeza como afecto acompaña al sujeto frente a la pérdida, frente al duelo, sea de un ser querido, de un esfuerzo que no ha dado los frutos que esperábamos, la pérdida de un puesto laboral o social, etc. O sea, es producto de una herida que el sujeto sufre en el transcurso de su vida, es producto de las pérdidas que la vida genera en su desarrollo y son parte de ella.

No existe por tanto la posibilidad de escapar a la tristeza, sino de superarla como parte del duelo. Muchas veces, alentado por un discurso social que niega la tristeza y propone la salida inmediata a través del consumo de objetos, fármacos o la negación, las personas intentan no experimentarla, lo cual lleva inevitablemente a su transformación en síntomas muy variados (actitudes maníacas, aislamiento, consumo de sustancias químicas, etc.).

Debemos aceptar que la tristeza no solo es natural, sino que es necesaria como parte del duelo y superación de las situaciones, y que cuando hay dificultades para aceptarla es que hay un conflicto que no permite al sujeto enfrentar los problemas y pérdidas con naturalidad, apoyándose en la palabra como elemento fundamental para encontrar sentido y sostener un lazo con el otro.

Sentimiento de angustia

La angustia como tal es el afecto que surge a partir de la aparición de algo que no es tolerable para el sujeto, la angustia “no miente” dice Lacan, nos anuncia de la presencia de algo que el sujeto no puede tolerar, pero por sobre todo es “algo” que conscientemente desconoce, ese sentimiento surge en las fobias, que no se explican por la realidad objetiva (miedo a las palomas), no se trata de una amenaza “real” para el sujeto, pero sí de una amenaza en un registro anímico inconsciente.

Cuando estamos frente a la presencia inminente de una situación que no podemos tolerar por razones que no manejamos, que escapan a una razón lógica, allí la angustia hace aparición, de alguna manera podemos decir que nos protege ya que nos pone en alerta de aquello que no podemos comprender.

La dificultad surge cuando las situaciones angustiosas se repiten ya que la extensión de situaciones que generan angustia se multiplican y por lo tanto se recorta la libertad y calidad de vida del sujeto. Esto hace necesario comprender qué está representando la angustia, manejar qué es lo que verdaderamente angustia al sujeto, por detrás de la situación concreta se oculta un motivo más profundo.

La tristeza es superada en forma autónoma generalmente, pero cuadros de depresión y angustia requieren una orientación profesional y un tratamiento terapéutico que ayuden a la superación de éstos.

H. Alejandro Alfonso Lateulade
Lic. Psicología – Psicoanalista